Miedos infantiles y libros para enfrentarse a ellos

Los miedos infantiles forman parte del desarrollo normal del niño, pero debemos conocer algunas pautas para lo que es "normal" no se transforme en una fobia que pueda condicionar el desarrollo del peque en el futuro.






Hace unas semanas tuve la fortuna de poder asistir a un curso sobre los miedos infantiles, impartido por una psicóloga y terapeuta infantil sensacional que nos facilitó algunos consejos que nos pueden servir de ayuda a la hora de enfrentarnos a este tema. Esto es algo de la teoría (muy de "sentido común") que he aprendido, por si te puede ser de utilidad, pero yo no soy una especialista. Si necesitas más información consulta con un psicólogo infantil.

Diferencia entre miedo y fobia

Un niño puede expresar un miedo corriente a un ruido fuerte, a un desconocido o a las hormigas. Es natural que así sea pues son situaciones que no controla y que desconoce, lo que favorece su precaución. Pero si ese miedo provoca que cada vez que ve una hormiga eche a correr, o que cada vez que se acerca un desconocido el pequeño sufra de manera considerable, puede ser que el miedo se haya convertido en fobia. Una fobia (palabra derivada del griego Fobos, o sea, pánico) es un miedo muy intenso y desproporcionado, y que puede impedir el desarrollo normal del pequeño si no le ayudamos.


Tipo de miedos

Según la edad de tu peque, los miedos van a ir cambiando. Es decir, los miedos tienen distintas fases que se corresponden con la edad en la que se encuentra el niño. Desde los más tempranos (alrededor de los nueve meses) como pueden ser el miedo a los ruidos o a los extraños, el miedo a la separación de las figuras maternas o paternas con el inicio de la escuela infantil o el cole, hasta el miedo a la oscuridad, el daño físico o la muerte según van creciendo y van descubriendo nuevas realidades. Algunos miedos no superados pueden acompañar al peque mientras se superponen miedos nuevos.

Etapa inicial (Aproximadamente empiezan sobre los 6 meses)

Miedo a las alturas, a los desconocidos o a los ruidos. Sobre esta edad también va surgiendo poco a poco la ansiedad al separarse de la figura materna, paterna o de apego que se ven intensificados cuando el peque empieza a ir a la escuela infantil o al cole.


Etapa preescolar (Suelen aparecer a partir de los 2 años hasta los 6 años aprox.)

Se mantienen los miedos anteriores y aparecen nuevos miedos ya que se incrementan los estímulos cognitivos de los pequeños, por lo que son muy frecuentes los miedos a la oscuridad, a monstruos imaginarios, a los animales... Su imaginación es mayor, y los armarios pueden ser hogares de terribles seres fantásticos. También el miedo a los cambios se hace presente, ya que crean en el peque inseguridad e incomprensión. Los miedos escolares son muy amplios: desde la ansiedad por la separación de los padres hasta el miedo al fracaso escolar o a realizar actividades sociales en público (como leer).

A partir de los 6 años.

Los miedos se vuelven más realistas y específicos, ya que el niño tiene una representación más clara de lo que le rodea. Surgen el miedo a la muerte, al daño físico, a las separaciones o divorcios de los padres, a los médicos y tratamientos; también puede pervivir la ansiedad por el fracaso escolar, o el temor hacia algún compañero en particular.


Como podemos ayudar a controlar los miedos

1. Es importante respetar el miedo de los niños. No hay que reírse de ellos, minusvalorarlos o restarles importancia. No debemos hacer comparaciones con otros niños (Ejemplo: "Mira María que valiente que se tira por el tobogán y tu no."). Hay que darles valor (Ejemplo: "Entiendo que te de miedo el tobogán porque está muy alto. Pero estoy segura de que con la ayuda de mamá y papá conseguirás tirarte uno de estos días tu solito.") y hay siempre que estar al lado del niño y prestarle todo nuestro apoyo, escuchando al pequeño y dejando que exprese todos sus temores.

2. Los miedos hay que enfrentarlos, y para ello tenemos que trasmitirles confianza y protección. Pueden sentirse seguros con nosotros, ya que nosotros les entendemos. Sus miedos son una situación muy "real" y debemos tratarla como tal. Podemos compartir los miedos de nuestra infancia con ellos y siempre acompañarlos para que puedan superar sus temores.

3. Trata de convertir el miedo en un juego: si teme a la oscuridad trata de que viva la oscuridad (poco a poco, con suavidad) como algo divertido (Ejemplo: puedes realizar juegos de búsqueda de tesoros -con linternas y premios escondidos- en su cuarto de juegos; puedes contar cuentos divertidos a oscuras; divertirse con juegos de sombras, etc.).

4. Dale más confianza ante sus temores, para lo cual no dejes de alabar o premiar cuando consiga superar un pequeño temor. 

5. Cuéntale siempre la verdad: muchas veces es la falta de información la que puede producir los miedos. No exageremos las situaciones nuevas, como ir por primera vez al cole, pues que le estemos repitiendo todo el día -dos meses antes- que en septiembre empieza el nuevo cole, solo puede crearle ansiedad y tensión.

6. Recordarte que hoy día dispones de libros y cuentos que sirven de gran ayuda para que los peques puedan superar sus miedos. Pregunta por ellos en tu biblioteca o en tu librería. 

  
  

Bibliografía recomendada: José Antonio Marina, Los miedos y el aprendizaje de la valentía. Ed. Ariel.

Comentarios

  1. Me ha venido muy bien tu información ya que tengo una niña y estamos en una "etapa miedo" a que enferme yo,el perro...no puede vivir con ese tipo de miedo ya que creo que le generaría una ansiedad.Gracias por los consejos,los voy a anotar
    Bss

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    1. Si, el tema 'miedos' es muy común... pero hay varias maneras para irlis enfrentarlos. Espero que te pueda servir de ayuda la entrada; el libro que cito de Jose Antonio Marina es muy útil. Verás como se va solucionando poco a poco.

      Besotes!

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  2. Yo tengo muchos miedos. A andar sola por la noche en la calle, a las cucarachas, a la oscuridad (no en el sentido de encontrarme con un fantasma sino porque me da por pensar que me voy a golpear con algo y me voy a hacer daño). Un besote!!!!

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    1. Los miedos pueden ser muy sanos y pragmáticos y están muy bien siempre que no se vuelvan paranoicos... jajaja... mi miedo a las arañas es fobia total!! Lo de las cucas es mas ascazo que otra cosa para mi...

      Muas!

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  3. Muchas gracias por toda la información, me parece muy interesante!

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    1. Muchas gracias María!! Me alegro un montón!!!

      Besotes!

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  4. Muy interesante el post y las propuestas que pones. Yo también tengo la misma fobia que tú, y aunque he tratado de disimularla delante de mis hijas, la han cogido en un momento, y ahora no paran de bromear conmigo. El día que me de algo por ver una enorme y se asusten de mi cara, otro gallo cantará. (es broma, delante de ellas trato de que no vean ese miedo irracional.)

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    1. Muchas gracias Marta!! Si, yo también trato de actuar igual y de disimular mis miedos delante de la peque para que no los haga suyos... pero el día que vea una enorme, delante de mi cara o subiendo por una camiseta seguro que no puedo evitar echar a correr gritando... ji!

      Besotes!

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  5. como que le tienes miedo a las arañas? si tienes una de logo!

    yo tengo fobia a los puntitos desordenados, a las alturas, a las cucarachas... y a la mayoría de personas ¬¬U

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    1. jajaja... trato de enfrentarme a mis miedos, aunque no consigo gran cosa... je! (Y es la única que no me da pavor, por cierto, es lo poquito que he conseguido).

      Tus fobias me recuerdan a las "dulces manías" de mi peque: a la mayoría de las personas, a los colores desordenados, a los cambios de color de la acera... ji!

      Besotes!

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  6. Una buena entrada, muy útil. Supongo que todos los niños pasan etapas de miedos, los mios tienen miedo a los perros, aunque cada vez un poquillo menos, menos mal. Yo no creo tener miedo a nada tangible, pero me angustia mucho pensar en la enfermedad o la muerte, mucho, no sé si eso cuenta o le pasa a todo el mundo... Creo que el quid de la cuestión para trabajar los miedos es enfrentars a ellos de manera no taumática, poco a poco desde el conocimiento de lo que sucede en nuestro interior cuando nos enfrentamos a ellos... qué fácil es decirlo y que difícil hacerlo :)
    Un besazo

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    1. Muchas gracias Bichera!!! Hay ciertos miedos que son comprensibles y naturales: no son negativos, si no que forman parte de nuestro ser natural. Gracias a los miedos conseguimos sobrevivir como especie animal. Creo que es normal y sano tener miedo a enfermar, a animales peligrosos, a lo desconocido (dentro de esto figura la muerte)... Solamente podemos inferir que no gestionamos bien nuestros miedos si nos llegan a paralizar y nos impiden un desarrollo normal. Son conclusiones propias a las que llego después de lo que he leído...

      Besotes!

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  7. Un post súper interesante. Peque también tiene sus miedos, me tomo nota mental de tus recomendaciones para ir trabajándolo. Un besote!!
    Muas!

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    1. Muchas gracias Mo!!! Me alegra saber que puede serte útil.

      Besotes!

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